Gracia que Redime

 TEMA: GRACIA QUE REDIME

TEXTO: EFESIOS 2:8-9

INTRODUCCION

La gracia de Dios no solo produce perdón, misericordia, sino que también nos lleva tomar el lugar de hijos que nos dio en su gran amor sin merecerlo. Todo se origina en la gracia de Dios: Él toma la iniciativa para proveerlo. La salvación es dada a los que son totalmente indignos de ella, sobre la base de la Persona y de la obra del Señor Jesucristo.

DESARROLLO

Veamos la gracia que redime en la vida de los hijos rebeldes (prodigo):

Lucas 15:11-32

DOS HIJOS (11): Dios llama de regreso a sus hijos. Las 3 parábolas acá tipifican tres tipos de personas, una moneda perdida que no sabe que está perdida, una oveja perdida que no se sabe que está perdida pero que no sabe cómo regresar, y un hijo perdido que no sabe cómo regresar

DAME LO QUE ME PERTENECE (12): ¿Qué le pertenecía? Por gracia lo recibiría, pero no era de él. Esa es la actitud de la humanidad de hoy, que cree que lo que es de Dios le pertenece a el, como la vida, su voluntad, su cuerpo, etc. Por eso el aborto, la decisión de sexo, etc.

DIOS NO PELEA CONTIGO (12): Dios como Padre bueno, nos da el derecho de decidir nuestro futuro, pero eso no quiero decir que la vida que tenemos sea nuestra.

-       Te da el derecho de elegir qué quieres hacer con tu vida, no te detiene, aunque eso te destruya porque quiere que por ti mismo te des cuenta del estado de tu vida.

POCO TIEMPO DESPUÉS (13): como el pecado arruina la vida de cualquiera, sin importar cuánto dinero tenga, su estatus social, económico, religioso, etc.

-       Como se inicia con un cigarrillo, luego no deja la nicotina

-       Se inicia con un trago casual, luego no puedes sentirte bien si no tomas

-       Inicias con un puro de droga y luego no lo puedes dejar

Como el pecado degrada tanto que te lleva a la ruina, a la pocilga.

UNA GRAN HAMBRE (14): Dios permite la adversidad en momentos precisos para hacernos ver lo frágil que somos y lo equivocados que podemos estar

-       Un accidente, un atentado, la pérdida del trabajo, de la familia, una enfermedad, un error, una desgracia, una catástrofe natural, etc.

-       Dios usará lo que sea necesario para atraernos a Él por su gracia

Dios permite la adversidad para que el pecador sepa que necesita depender del Dios todo poderoso.

PRODUCE NECESIDAD (14): su alma lo hace tener hambre, necesidad de valor, de amor, como resultado de una vida sucia, lejos de Dios

LA POSILGA (15-16): primero tratamos de resolver la miseria de nuestros problemas por medios humanos, nuestros propios medios, sin volver al Padre. Este fue a uno de esa ciudad:

-       es el estado del pecado, la miseria, la destrucción, lejos de la familia, lejos de los que te aman, gente llorando por ti, extrañándote.

-       El pecado nos lleva lejos de Dios, de nuestra familia, de nuestros valores, de nuestra fe, etc.

-       Allí te hace sentir que no vales nada, que no eres nadie, etc.

VOLVIO (17-19): tu puedes hacer con tu vida lo que quieras, puedes tomar las decisiones que quieras, pero un día regresaras, pero si no entiendes ahora posiblemente te toque regresar como el prodigo.

-       Esperaras una hambruna, una desgracia natural, una enfermedad, una escasez económica, etc.

-       Del sentir o pensar a las palabras y de las palabras a la acción.

EL AMOR DEL PADRE (20-24): ¿Por qué será que tenemos que llegar a lo más bajo, en la peor desgracia, en los momentos más difíciles para venir al padre?

-       Lo mejor de todo es que él no te recrimina, ni te señala, ni te rechaza, a pesar de como vienes a Él.

CONCLUSION

Lucas 15:32

La gracia de Dios nos da el lugar de hijos cuando nos perdona, aunque no la merecemos. El hijo paso de muerte a vida, y esta historia nos ilustra:

1.     El arrepentimiento genuino de un pecador

2.     La humildad para reconocer el estado de miseria

3.     Decisión y acción de volver al padre después de volver en si

4.     El perdón de un padre que siempre está a la espera del regreso de su hijo

5.     El amor incondicional de un Padre que nunca te dejara de amar, no importa que tan bajo caigas

6.     Y el gozo del Padre al ver a su hijo volver a la vida después de estar muerto.