Los Errores de Abraham

SERIE: ERRORES, 1ª. CORINTIOS 10:11

TEMA: LOS ERORRES DE ABRAHAM

TEXTO: JUAN 8:39

INTRODUCCION

Abraham es un ejemplo de fe y confianza en Dios, de hecho, Dios le llama el padre de la fe, por su ejemplo de fe. Sin embargo, también cometió errores, de las cuales también hay que aprender, para no cometerlas como él.

·      ¿Como podemos saber cuáles han sido los errores más graves o grandes que hemos cometido en nuestra vida?

• ¿Cuál es el parámetro o el sistema de medición para reconocer la gravedad de un error?
• Y esa forma de medición de los errores la podemos resumir en una sola palabra: CONSECUENCIAS.
• Todos los seres humanos cometemos errores, todos nos equivocamos, pero hay errores que son más graves que otros.
• Una persona que, cometió el error de no ver una grada que estaba frente a ella por andar texteando, y al caer se quebró un hueso se dará cuenta que fue un error grave, pero aquella persona cometió el error de cruzar la calle sin ver que venía un autobús a toda velocidad frente a ella, cometió un error fatal, que le costó, o podría costar, la vida.

DESARROLLO

Lo errores de Abraham:

I.              LE COSTO SOLTAR EL PASADO

Génesis 12:1-5

Obedeció a medias, le costó soltar todo lo que Dios le pidió, por eso, cuando le piden a su hijo, ya había aprendido su lección, por eso lo entrego.

-       Resista quedarse atorado en el pasado

-       No arrastre nada que lo ate al pasado

-       Concéntrese en su llamado y en las promesas de Dios a tu vida

-       Vea hacia adelante, no hacia atrás

ABRAHAM Y LOT PELEAN… si no dejas tu pasado atrás y todo lo que te ata a él, tarde o temprano producirá conflicto con la nueva naturaleza y las promesas de Dios.

II.            FUE IMPACIENTE ANTE LA PROMESA DE DIOS

Génesis 16:1-5

Dios prometió a los hijos de Abraham (Génesis 15: 5; Génesis 22:17). Pero cuando esto no ocurrió tan rápido como Abraham pensó que debería, se impacientó con Dios y tomó las cosas en su propio control. Sarah todavía no tenía hijos, por lo que le dijo a Abraham que durmiera con su criada, para que pudieran obtener un hijo de la unión.

-       En su impaciencia escucho a su mujer marcada por el estigma de la esterilidad, el cual en esa cultura se veía como una maldición.

-       Sin embargo, este no era el plan de Dios.

-       La promesa de Dios fue para la descendencia de Abraham y la unión de Sara (Génesis 15: 3-4).

-       Bien intencionado, pero equivocado. El quiso ayudar a Dios en su plan.

-       Abraham pensó que Dios tenía que hacer las cosas en el momento que el quería

III.          MIENTE DOS VECES

Génesis 12:10-13, Génesis 20:1-6

Por falta de fe, falta de confianza y dependencia de Dios.

En dos ocasiones, Abraham temió que lo mataran para que un gobernador pudiera tomar a Sara como esposa. Para protegerse, Abraham convenció a Sara de que dijera que era su hermana.

A nadie le gustan las mentiras, especialmente a aquellos que te abren la puerta de la confianza. Pero seamos sinceros, todos hemos mentido alguna vez en la vida. Decimos una mentira completa o una verdad a medias, lo cual es lo mismo. No ser honestos en todo nos convierte en mentirosos. Algunas veces mentimos por proteger a otros, pero la mayoría de las ocasiones lo hacemos para salvar nuestra propia vida. No queremos que nuestra persona se vea dañada. Primero yo, después yo y al último mi prójimo.

-       A Abraham le fue bien, pues le regalaron toda clase de bienes a cambio de Sara

-       Pero ¿y la integridad física de su esposa? Aún a pesar de esa mentira, Dios es tan bueno que protege a los que él llama para sus propósitos.

-       ¿Cómo los cuido el Señor? Enviando plagas terribles al faraón y a su familia. Abraham no pudo proteger a su esposa, pero Dios es quien siempre guarda de todo mal a los desamparados (Gn. 12).

Una vez escuché que alguien dijo: “un hombre inteligente aprende de sus propios errores, y uno sabio de los errores de los demás.” Pero ocho capítulos después, parece que Abraham no había aprendido la lección. Abraham dudaba claramente de la promesa que Dios le había hecho. Tuvo que ir a otro país y temer por su vida. Nosotros también podemos caer fácilmente en la misma trampa cuando las dificultades llegan a nuestras vidas. Podemos sentir que Dios ha perdido el control o que no nos cumplirá su promesa. Así recurrimos a algo que Dios no quiere que hagamos y empeoramos la situación.

IV.         NO QUISO ESCUCHAR A SU ESPOSA

Génesis 21:8-13

Dios le dice que saque a Ismael. La tensión con Agar y su hijo Ismael resurgió en la fiesta que Abraham organizó cuando Isaac fue destetado. Lo que comenzó como una ocasión alegre para Sara, pronto se volvió una experiencia molesta y dolorosa cuando vio que Ismael se burlaba de Isaac.

La reacción de Sara fue pedirle a Abraham: “Echa a esta sierva y a su hijo, porque el hijo de esta sierva no ha de heredar con Isaac mi hijo” (v. 10). Abraham también se disgustó, porque “Este dicho pareció grave en gran manera a Abraham a causa de su hijo” (v. 11).

Aunque Isaac era el hijo de la promesa, Ismael también era su hijo y echarlo sería muy doloroso. Abraham se sentía muy triste por la petición de Sara. Pero cuando Dios le dijo que escuchara a su esposa y le prometió que también haría una nación de Ismael, accedió a que Agar e Ismael se fueran.

CONCLUSION

Santiago 2:20-24

Abraham llego a ser amigo de Dios, su fe llego a crecer para depender totalmente de Dios, a tal manera, que cuando Dios le pidió a su hijo, no se lo negó. Sin embargo, esto fue después de un proceso de aprendizaje. Proceso en durante el cual, cometió muchos errores, pero el levantarse de esos errores y seguir caminando lo llevó a ser el padre de la fe.