Los nombres de Dios: Jehova-Tsidkenu

TEMA: JEHOVÁ-TSIDKENU

TEXTO: JEREMÍAS 23:5-6

INTRODUCCION

Aún cuando la palabra más común para justo en el Antiguo Testamento (Hbr tsédec); significa derecho, equidad, justicia, justo, recto. En el Nuevo Testamento, la palabra (Gr. Dikaiosúne) significa equidad (de carácter o acto), justicia, recto, en un sentido ético ambas significan recto o justo. Al decir que Dios es justo, estamos diciendo que Él siempre hace lo que está correcto, lo que debe hacerse y en forma consistente, sin parcialidad ni prejuicios. La palabra justo y la palabra recto, son idénticas tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento.

DESARROLLO

La rectitud (o justicia), es la expresión natural de Su santidad. Si Él es infinitamente puro, quiere decir que debe oponerse a todo pecado y esa oposición debe demostrarse en el tratamiento que Él da a Sus criaturas. Cuando leemos que Dios es recto o justo, se nos está asegurando que Sus acciones hacia nosotros, están en completo acuerdo con Su naturaleza santa.

I.              MANIFESTACION DE SU CARÁCTER

Salmo 11:7

La rectitud de Dios es evidente en la forma que Él actúa consecuentemente con Su propio carácter. Dios siempre actúa en forma recta. Cada uno de Sus actos es consecuente con Su carácter.

II.            JUEZ JUSTO

Salmo 7:11, Génesis 18:25

Dios es infinitamente recto, no toma por inocente al culpable y da a cada uno el pago de sus obras, Eclesiastés 12:14. La tarea de un juez no es condenar al reo solamente, si no que en virtud de la pruebas, a favor o en contra, determina un dictamen, ya sea de libertad o de condenación.

La justicia de Dios debe ser satisfecha, por lo tanto el pecado debe ser pagado con muerte (Romanos 6:23), pero aquellos que apelan a la sangre de Jesús encuentra el pago de su pecado en el sacrificio de Jesús y reciben libertad y vida por causa de la misma justicia de Dios, 2ª. Pedro 1:1, 1º. Reyes 8:39.

Como juez Dios no puede ser sobornado ni manipulado, mucho menos intimidado, ni por nuestros sentimientos no por nuestras lagrimas, a menos que sean de arrepentimiento, Deuteronomio 10:17, Salmo 119:137.

-       El juez espera una declaración de culpabilidad nuestra para aplicar la sangre de su hijo y entonces darlos libertad, Proverbios 28:13, 1ª. Juan 1:9-10, 1ª. Juan 2:1-2.

III.         SU JUSTICIA MUESTRA ES UN CAMINO

Deuteronomio 32:4

La camino de la justicia es caminar en obras que agraden a Dios y manifiesten a través de nosotros su rectitud y su naturaleza santa. Por eso Dios espera que nosotros seamos justos. Al caminar en su justicia manifestaremos obras justas, Apocalipsis 19:8.

-       Esa senda nos llevará a la perfección, Hebreos 12:23.

-       Permite que Dios escuche nuestras oraciones y nos vea, 1ª. Pedro 3:12.

-       Nos permite obtener la vida eterna, Mateo 25:46.

La senda (camino) del justo debe ir en aumento, implica que conforme la justicia de Dios es revelada a nosotros las obras justas en nuestra vida debe aumentar cada día mas, Proverbios 4:18.

CONCLUSION

Romanos 5:7-10

Todos seremos juzgados por la justicia de Dios, pero los que ahora nos amparamos al sacrificio de Jesús somos justificados por la sangre de ese sacrificio porque en el se satisfizo toda justicia.