La Puerta Vieja

TEMA: LA PUERTA VIEJA

TEXTO: NEHEMIAS 3:6

INRODUCCION

La restauración y ministración de nuestra alma va creciendo poco a poco, a medida que nosotros nos dejemos ministrar por el Señor. Primero entramos por la puerta de las Ovejas, dejando de ser criatura de Dios para ser ovejas de su prado, restaurando nuestra comunión con Dios. Luego restauramos la puerta del Pescado, llevándonos a contar a otros lo bueno que nuestro Dios es.

Ahora debemos restaurar la puerta vieja y cerrarla para que el enemigo no tome ventaja y nos  haga volver atrás. Esta puerta es, la que si se abre o no se restaura, nos llevará a la vieja manera de vivir.

DESARROLLO

I.               RESTAURANDO LA PUERTA

Nehemías 3:6

Viejo (a) (Sinónimos): anciano, acabado, arruinado, antiguo, usado, estropeado, destruido, atado.

Esta puerta se llama así porque se cree que era la única puerta a la entrada de Salem, donde Melquisedec era rey, donde luego se fundó la ciudad de Jerusalén, y sus doce puertas. Les recordaba  a sus moradores donde y como había nacido esta ciudad, les recordaba de su pasado. La puerta vieja se debe restaurar para tenerla cerrada y no dejar que nuestro pasado entre de nuevo a nuestra alma, y así tampoco nosotros volver al pasado.

II.             SUS EDIFICADORES

Esta puerta fue edificada por:

1)    Joyada: Su nombre significa Jehová conoce. Personas que se dejan conocer por Dios, que abren su corazón y sacan todo lo viejo de El. Su padre era Paseah que significa cojo. El reconoce que tenía una herencia ancestral que no le permitía caminar rectamente. Nos habla de cual era su caminar en la vida vieja.

2)    Mesulam: Significa amigo o aliado. El también ayudó a reedificar la puerta del pescado, es decir necesitamos esa comunión con Dios y su Espíritu Santo para seguir edificando. El padre de El se llama Besodías que significa el consejo de Jehová. Solo se puede dejar la vida vieja a través del consejo de Dios en su palabra, la oración, el ayuno, la predicación y la comunión con El.

III.           LA VIDA VIEJA

1ª. Corintios 5:7-8

Muchos creyentes vuelven atrás a su vida vieja, porque no cerraron la puerta vieja con llave, o porque aun está destruida y por allí entran los recuerdos de lo que éramos. Debemos renunciar a quienes éramos y caminar en pos de nuestro llamado y no cometer el error de Israel que anheló lo que había dejado atrás en Egipto, Números 11:4-6.

En 2ª. Corintios 5:17 dice que somos una nueva criatura, que hemos muerto al pasado, a quien éramos, a la vida que llevábamos, pero algunas personas son perseguidas por su pasado porque:

1)    No se han bautizado: Exodo 14:4-8, 26- 31. Faraón y sus ejércitos no querían soltar a Israel, pero al cruzar el mar rojo (figura del bautismo) Dios los ahogó y con ellos su pasado.

2)    No han cerrado la puerta vieja: Lucas 11:24-26. Cuando una casa tiene puertas abiertas cualquiera puede entrar y habitarla. Por eso el pasado que salió regresa y habita de nuevo la que fue su casa, ya que el creyente no se llenó del Espíritu Santo y no restauró la puerta vieja.

IV.           RESTAURANDO NUESTRA MENTE

Efesios 4:20-24

La única manera en que podemos despojarnos de nuestra anterior o vieja manera de vivir, será:

1)    Aprender de Cristo (V 20)

2)    Oírlo a El (V 21)

3)    Ser enseñados y aprender de El (V 21) Juan 6:45

4)    Renovar el espíritu de nuestra mente, siendo llenos del Espíritu Santo (V 23-24)

5)    Teniendo la mente de Cristo conociendo su voluntad, su corazón, su palabra y su mente, 1ª. Corintios 2:16.

CONCLUSION

Filipenses 3:13-14

Habrán momentos en que quieras abrir la puerta vieja y regresar atrás, lo mejor que puedes hacer es crecer en tu relación con Dios, y seguir adelante sin quitar la mirada del blanco, para llegar a la meta y obtener el premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.