El Mistero de la Iniquidad.

 

TEMA: EL MISTERIO DE LA INIQUIDAD

TEXTO: 2º. TESALONICENSES 2:7

INTRODUCCION

Maldad, injusticia grande. El término alude a una gran injusticia o a algo malicioso. También se le define como Anomia. La anomia: la ausencia de ley, normas o reglamentos.

-       La condición de estar sin ley, injusticia, ilegalidad, falta de conformidad con la ley, negación de la ley, violación transgresión, quebrantamiento de la ley, desacato a la ley, iniquidad, impiedad, maldad, pecado (Diccionario Griego del Nuevo Testamento).

El misterio de iniquidad comenzó a operar en el tiempo del apóstol Pablo y ha estado en acción durante toda la historia de la Iglesia, más culminará con la apostasía total y la aparición del Anticristo.

DESARROLLO

I.              ANTI-TESIS DEL MISTERIO DE LA PIEDAD

2ª. Tesalonicenses 2:8-12

Es la manifestación del hijo de perdición, el inicuo, Daniel 11:36-39.

Entre las muchas características que este inicuo tendrá, una de las mas grandes que tendrá será su forma de hablar, Salmo 41:6, Proverbios 6:12, Santiago 3:6, Salmo 10:7.

-        Este personaje es producto de la maldad, el pecado y los deseos de satanás por oponerse a Dios, Salmo 7:14.

II.            YA ESTA EN ACCION

Isaías 59:2-4

Desde que el hombre peco se alejó de Dios y empezó la operación de la iniquidad, Romanos 3:23.

Sin ley, sin normas, sin respeto por la vida, sin respecto al gobierno, sin respeto a los padres y todo lo que suponga gobierno, sin control, depravación, rebelión.

-       El misterio de la iniquidad está trabajando activamente en lo político, en lo económico, en lo social, en lo moral, en lo familiar, en lo religioso, dando los toques finales al escenario de la historia, para que haga su aparición el Anticristo, aquel “inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás”.

La sociedad se va deteriorando cada día más en todos los sentidos, sobre todo el moral, por causa de la iniquidad.

III.          ENFRIA EL AMOR

Mateo 24:12

Esto produce que los hombres busquen la maldad cada día.

CONCLUSION

Salmo 59:5

Dios castigará la maldad de los inicuos, pero, sobre todo destruirá al inicuo, el engendro del misterio de la iniquidad, Salmo 7:16.