TEMATICA: PODER
TEMA: IGLESIA PODEROSA
TEXTO: HECHOS 1:8
INTRODUCCION
La misión de los apóstoles consistía en esparcir el evangelio y era la razón principal del poder que les dio el Espíritu Santo. Este suceso cambió de forma dramática la historia del mundo porque permitió que el mensaje del evangelio llegara a todos los rincones de la tierra.
Los apóstoles ya habían experimentado el poder del Espíritu Santo para salvar, guiar, enseñar y hacer milagros. Pronto recibirían su presencia dentro de ellos y una nueva dimensión de poder para testificar.
Testigos: La palabra griega (martir) significa "el que muere por su fe", porque ese era casi siempre el precio que se pagaba por dar testimonio de Jesús
DESARROLLO
I. LA OBRA DEL ESPIRITU SANTO
Levíticos 8:12 (RV60) “santificarlo”
El espíritu hace hombres y mujeres, comunes y corrientes, en personas apartadas, consagradas, santas para servirle a Dios. La Obra del Espíritu Santo cumple varios propósitos en nosotros:
1. Regenerando: La primera área de trabajo del Espíritu está en el proceso de regeneración. Otra palabra para regenerar es “renacer,” de donde procede el concepto de “nacer de nuevo.” Juan 3:3
· El fruto de la obra de regeneración del Espíritu es la fe (Efesios 2:8). Ahora
2. Residiendo, Llenando y Ungiendo: Juan 14:16-17, Su Aquí es donde aparece la mayor diferencia entre los roles del Espíritu en el Antiguo y en el Nuevo Testamento. El Nuevo Testamento enseña que la morada del Espíritu Santo es permanente en los creyentes (1ª. Corintios 3:16-17; 1ª. Corintios 6:19-20). Cuando ponemos nuestra fe en Cristo para salvación, el Espíritu Santo viene a morar dentro de nosotros.
o Ungir: consagrar, apartar, separar, para uso solo de Dios, y asi ejercer un oficio o tarea para Dios
3. No sella y es nuestra garantía: Efesios 1:13-14, en contraste con esta obra en el Nuevo Testamento, la permanencia del Espíritu en el Antiguo Testamento era selectiva y temporal. El Espíritu “vino sobre” personas del Antiguo Testamento tales como Josué (Números 27:18), David (1º. Samuel 16:12-13) y aún Saúl (1º. Samuel 10:10). En el libro de los Jueces, vemos que el Espíritu “vino sobre” varios jueces a quienes Dios levantó para librar a Israel de sus opresores. El Espíritu Santo descendía sobre estas personas para tareas específicas.
o Empodera: Hebreos 2:4, nos da los dones para empoderarnos y así mostrar la gloria y poder de Dios a los perdidos.
4. Restringiendo: Juan 16:7-8, nos hace ver lo que ofende a Dios, convenciéndonos de pecado para ya no pecar más.
5. Capacitando para el servicio (comisionarnos): Hechos 10:38, nada de lo que el cristiano haga tendrá valor en el reino si no comprendemos que somos ungidos y capacitados por Dios para su obra, Hechos 13:2.
La evidencia de estas áreas de la obra del Espíritu Santo está presente tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento.
II. LOS UNGIDOS
Hechos 11:26
La unción se debe evidenciar en las acciones, las palabras, la conducta de vida, forma de vestir, manera de hablar, para que nos consideren verdaderos cristianos:
Cristianos: ¿Para qué nos ungió el Espíritu Santo?
a. Manifestar la gloria de Dios al mundo, Hechos 10:38.
b. Anunciar las buenas nueva, Lucas 4:18
Veamos algunos ungidos:
1. Para ejercer nuestro sacerdocio: 1º. Samuel 2:25 – así podremos ser fieles, andar conforme a su corazón, nuestra casa este firme (no como la de Eli) y Dios nos respalde.
2. Vencer temores e inseguridades: Deuteronomio 34:9 – Josué era un hombre que había visto la gloria de Dios, sin embargo, sus temores lo detenían y solo con la unción de Dios pudo vencer sus inseguridades, Josué 1:9.
3. Cumplir tu propósito: 1º. Samuel 16:11-13 – David fue menospreciado constantemente en su vida. Si no hubiese sido por la unción de Dios en él, no hubiese sido el gran rey que fue, derrotando gigantes, Salmo 23:5.
4. Manifestar sus dones y predicar con revelación y autoridad: Hechos 2:4 & 15-21 – Pedro mudo en un hombre común y corriente a un hombre con un mensaje poderoso y una interpretación adecuada de la escritura, a pesar de no ser un teólogo como Pablo.
Solo entiendo que somos apartados para Dios (ungidos) podremos ser vasos útiles para nuestro Dios.
III. NO VALORAR LA UNCION
Jueces 15:14-15
Sansón fue llamado para ser un juez poderoso que pudiera librar a Israel de sus opresores y manifestar la gloria del Dios de Israel antes los enemigos de su pueblo. Fracaso, no porque Dios no estuviera con el, si no, porque nunca entendió ni valoro la unción de Dios en él.
· NUNCA se vio como un ungido.
Saul: 1º. Samuel 10:1 & 6-11 & 20-23
· Saul nunca comprendió para y porque Dios lo había ungido. El ungido de Dios perdió su tiempo persiguiendo a otro ungido por celos e inseguridades.
· 1ª. Samuel 16:14 – el Espíritu Santo se apartó de Saul y lo entregó a sus pasiones.
· Isaías 63:10 – eso le paso al pueblo de Israel en general.
Nosotros: Efesios 4:30- podemos entristecer, apagar (1ª. Tesalonicenses) y resistir (Hechos 7:51) al Espíritu Santo.
CONCLUSION
Salmo 51:11
David sabia el riesgo que corría al pecar, perder la unción del Espíritu Santo. Cuidemos de no entristecerlo, apagarlo o resistirlo.
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