La Queja II

TEMA: LA QUEJA (II) DETIENE LA ENTRADA A CANAAN

TEXTO: NÚMEROS 11:1

INTRODUCCION

La queja es la actitud más antigua de la Biblia. Cuando somos confrontados por nuestras acciones y decisiones, la reacción más espontánea es quejarnos: “Fue culpa suya, no mía”. Adán no necesitó clases en el arte de la queja. Cuando peco y Dios lo confronto éste le respondió: “La mujer que me diste por compañera me dio y yo comí” y Eva, por su parte, dijo también: “La serpiente me engañó, y comí”, Génesis 3:12-13.

DESARROLLO

Queja: (hb) Anan, Expresión de dolor, pena, disgusto, descontento, lamento, disconformidad, enfado, resentimiento, chisme o murmuración.

-       Una reacción normal, cuando una persona o ser vivo reciben un golpe o es agredido física o moralmente, la respuesta que este da es una queja inmediata con el fin de repeler y evitar el daño.

-       La queja es un hábito común en las personas con resentimientos y pesimistas.

-       Se deleitan buscando de qué quejarse para tener un tema de conversación generalmente negativa que no conduce a nada.

-       Los chismes y las críticas también son quejas sobre los defectos que tienen los demás.

I.              EFECTOS DE LA QUEJA

La queja produce efectos que, al que más dañan es a la persona que se queja:

1.     Drena las fuerzas

Salmo 77:3

Cuanto más te quejas, más te centras en el problema y cuanto más te centras en el problema, más te quejas.

-       Solo te debilita día a día y te aleja de tu meta, de la tierra prometida.

-       Cada vez que las repites, refuerzas el poder que ejercen sobre ti, hasta que acabas tú mismo siendo la víctima de tus propias quejas.

-       La queja restringe tu capacidad de buscar soluciones, condiciona tu mente de forma negativa y limita tu entendimiento para recibir ideas creativas de Dios.

-       ¡Los resultados positivos no crecen en terreno negativo! No puedes quejarte y crear algo positivo al mismo tiempo.

2.     Pierdes Control de tu Vida

al quejarte, les otorgas tu autoridad a las personas y circunstancias de las que te quejas, y te conviertes en su víctima.

-       La gente sabe que quejarse no cambia las situaciones, ni tampoco mejora las cosas, sin embargo, le agrada poner en evidencia, que la realidad nunca le agrada.

-       El proceder del quejoso llega hasta negativizar lo positivo.

-       Nunca tiene gozo, no disfruta nada de lo que tiene.

La queja, no resuelve nada, porque es inoperante, no aporta soluciones, es el recurso de los resentidos que no se atreven a cambiar lo que no les agrada, ni aceptar lo que no pueden cambiar ni a las personas como son

3.     Contamina a Otros

Job 10:1

La queja invita a que otros hagan otro tanto y la queja contamina las relaciones también.

-       Es como un veneno que se inyecta e intoxica todas las partes del cuerpo. De forma sutil va contaminando tus relaciones, tu familia, tu lugar de trabajo, tu iglesia y tu entorno.

-       La queja contamina, tanto al que se queja como a todo aquél que la escucha.

-       A veces pensamos que con nuestra queja vamos a ayudar. Pensamos que “si nadie dice nada, nunca van a cambiar las cosas”, como si las palabras negativas pudieran producir cambios positivos.

1ª. Corintios 5:6

4.     Detiene el Plan de Dios

Salmo 55:2 

Te estanca en el desierto, evitando que Dios te meta en la tierra prometida.

-       Dejas de alabar a Dios y tu queja se convierte en tu habla.

-       Honra las dificultades, no a Dios.

Hebreos 3:16-19

II.           COMO VENCER LA QUEJA

Hay mecanismos que ayudaran a no caer presa de la queja:

1.     No hagas una queja sino una petición.

Salmo 102:1

Una primera medida para convertirse en alguien que no se queja es evitar a las personas quejosas, criticonas, murmuradoras y chismosas.

-       Aunque tu reclamo sea justificado, Dios lo captará como queja, y eso hará que se reduzcan las posibilidades de un resultado satisfactorio.

-       Recuerda que Dios ve la actitud del corazón

-       Ejercita tu fe creyendo que Dios obrara a tu favor

Salmo 142:2 

2.     Cuando ya lo has dicho, deja que Dios actúe.

Sólo Él puede cambiar a las personas, así que quítate del medio, sé paciente y dale una oportunidad.

-       Deja que Dios haga su trabajo, no te inmiscuyas en Sus asuntos y Él hará lo que tú no puedes, porque tiene recursos que tú ni siquiera te imaginas.

-       Cuando se le deja que se encargue totalmente del asunto, ¡Él cumple su parte a la perfección!

3.     ¿Qué debes hacer mientras esperas que Dios actúe?

Job 9:27

Alaba a Dios en medio de la adversidad y nunca le atribuyas despropósito a Dios.

-       Recuerda que él está en control en medio de tu caos.

CONCLUSION

Santiago 5:9

Proponte detectar, rechazar y desechar toda palabra de queja de tu vocabulario.