TEMA: LA MAYORDOMIA EN EL HOGAR
TEXTO: 1ª. CORINTIOS 4:1-2
INTRODUCCION
Al recibir a
Cristo en nuestro corazón recibimos la salvación, las promesas de su reino, el
perdón de pecados y al liberación de nuestra alma, pero con ello no solo
recibimos las bendiciones si no también
las responsabilidades de ese reino.
Nuestras
responsabilidades consisten en hacer todo lo que agrada a Dios y dar un buen
testimonio de nuestra salvación ante los demás. Agradar a Dios, entre otras
cosas, es se administradores de los misterios del reino que son revelados a
nosotros como su iglesia. Misterios como la salvación, nuestro hogar, nuestro
tiempo, nuestros vienes materiales, nuestras finanzas, nuestros privilegios,
nuestro ministerio, etc.
DESARROLLO
I.
UN MAYORDOMO DE DIOS
Salmo
24:1-2, Salmo 89:11
Hebreo: Natsab –
Oficial, reinar, vigilar, velar, guardar.
-
Tifsar:
Gobernador, príncipe, mayordomo.
-
Sar:
Uno que está a la cabeza o a cargo de un bien de otro.
Griego: Oikonos –
Gerente, mayordomo, dispensador, administrador.
-
Epitropos:
Superintendente, rector.
Concepto: Criado
o empleado de confianza que organiza una casa y dirige las tareas del resto del
servicio.
-
Persona
que por encargo del propietario, se dedica a dirigir, distribuir, gobernar,
dirigir y organizar bienes que no le pertenecen.
Somos llamados a
gobernar lo que a Dios le pertenece y en confianza lo ha conferido para nuestro
uso y que lo administremos sabiamente. ¡Somos los dueños!
-
Génesis 2:15. Dios puso
al hombre en el Edén para que lo cultivara y cuidara.
-
1 Crónicas 29:14. Solo le
damos de lo que El nos ha dado.
-
Romanos 12:2. No debemos
adaptarnos, amoldar a este mundo.
II.
CARACTERÍSTICAS DEL MAYORDOMO DE DIOS
Salmo 37:25
El mayordomo de
Dios sabe distribuir sus vienes con prioridades en el Cielo.
- 1ª. Timoteo 6:6-8. Viven contentos con lo que Dios les ha dado. Satisfechos porque saben que son peregrinos y extranjeros.
- 1ª. Timoteo 6:10. No aman al dinero más que a Dios.
- 1ª. Timoteo 6:17. Disfrutan lo que Dios les ha dado, confían en la provisión de Dios, no codician lo que no tienen.
- 1ª. Timoteo 6:18. Son generosos al dar, compartiendo lo que de Dios han recibido.
- Efesios 4:22-24 (NVI) El mayordomo de Dios se ha quitado el ropaje y la mentalidad de la vieja criatura, ha roto el odre viejo, por eso lo terrenal ya no es su prioridad.
- Juan 17:15-18. Tiene bien claro que no es de este mundo, que viene solo de paso. Cristo venció al mundo por nosotros, por eso aunque tenemos aflicción, venceremos, Juan 16:33, por eso las finanzas son un medio, no el fin.
- Filipenses 2:5-8. El mayordomo sabe que ese es un estilo de vida impulsado por el evangelio de Cristo al cual sirve con amor y devoción, por eso Dios le da más porque no lo usa para enriquecerse, si no para servir.
- Mateo 6:19-21. El mayordomo de Dios tiene su tesoro y su corazón en el cielo, por eso se desprende fácilmente de lo terrenal. Sabe que al invertir en lo celestial invierte en su futuro, Hechos 4:32, Filipenses 4:17.
- Lucas 16:10-12. El mayordomo de Dios es fiel al que le concedió confianza de administrar haciéndolo con sabiduría, con temor y no tomando lo que es de su Señor.
III.
LA MAYORDOMIA EN CASA
Lucas
16:13
-
Las
riquezas son un rival del Señorío de Cristo, es decir, el dinero o las riquezas
(mammón) es un dios que demanda ser reverenciado.
-
El
dinero en sí no es malo, sino la codicia por poseerlo.
-
Las
riquezas no buscan dueños, sino de quien adueñarse.
a)
Ananías
y Safira
Hechos
5:1-5
Ananías: Jehová
ha cubierto, Jehová es bueno.
Safira: Hermosa.
Era un hogar
cristiano con problemas de mala mayordomía.
b)
Sus
problemas:
1)
(V1) Querían alcanzar un
estándar de vida como los demás, un estándar de “Espiritual y dadivoso”.
2)
(V2)
Querían aparentar algo que no eran, generosos. El dinero les ofrecía la
oportunidad de forjar una imagen. Nadie les exigió dar.
3)
(V3) El dinero es la
fuente de conflicto y decisiones que se hacen. Hoy las familias no tienen
posesiones, sino que las posesiones las tienen a ellas. Mintieron y no dieron
lo que prometieron.
4)
(V4) Denota como
ofrendamos. Nos reunimos para adorar a Dios y confesar que Cristo es nuestro Señor
y Dios, pero en la ofrenda depositamos lo mínimo que nuestras conciencias nos
permite y diezmamos por obligación, responsabilidad o por costumbre pero no por
amor.
-
Mi
ofrenda es una muestra física y material de mi gratitud y amor a Dios. ¿Cuan
agradecido estás? ¿Cuánto lo amas?
5)
El
dar para ellos no era un acto de adoración, como el de los otros creyentes
(Hechos 4:32 & 34-37), sino de apariencia por lo que los otros hacían y
podían decir de ellos.
6)
No
tenían el dinero como una herramienta para vivir, sino como su medio de
subsistencia.
7)
Involucra
a toda la familia, ejemplo a sus hijos: Mentir, engañar, ocultar, malversar,
fingir, hipocresía, etc.
8)
Servían
a su codicia y ambición. Querían que los compararan con Bernabé que también lo
había vendido todo.
CONCLUSION
Tito
1:7-9
Esta palabra es
para ponerla por obra, para que con nuestro ejemplo podamos guiar a otros a
Cristo y su verdad.